La victoria de los Chiefs sobre los Raiders dejó tantos puntos positivos para los de Kansas City que me resulta hasta complicado determinar por cual comenzar. El partido ha sido la actuación más global de los Chiefs en lo que llevamos de temporada aunque también es cierto que no habían dejado el listón. Yendo a lo global, la defensa estuvo a un nivel muy decente forzando pérdidas en el ataque de Raiders y el ataque volvió a dejar una actuación aérea convincente. Vamos al detalle.
La condición de rookie de los recién llegados provoca que les prestemos mucha más atención y los analicemos con más optimismo que al resto. El hype siempre se dispara en los rookies. En nuestro caso, todas las alabanzas que se lleve el center rookie Creed Humphrey son merecidas porque su nivel de dominio en esa línea renovada desde el primer día está siendo alucinante. Tiene una facilidad para imponerse con contundencia y aplastar en los rivales que asusta y que lo está convirtiendo en el mejor jugador de la unidad junto a otro rookie, Trey Smith.
La línea tuvo una actuación bastante completa en protección de pase lo que permitió a Mahomes disponer de más tiempo para lanzar y encontrar a los receptores liberados. Mahomes sigue esforzándose en no salirse del pocket tratando claro de gestionar mejor la previsión rival. Y esto lo está facilitando tanto la línea ofensiva como el game plan de Andy Reid. Más screens, pases de corto yardaje, más juego de carrera y menos big plays que diversifican el ataque de los Chiefs dificultando así la Cover-2 tan empleada para frenar este ataque.
Y vimos un buen partido del juego de pase donde Mahomes se fue por encima de las 500 yardas y 5 TDs y tuvo tres socios principales: Travis Kelce, Tyreek Hill y Byron Pringle. Travis Kelce firmó uno de sus mejores partidos siendo una arma letal en los terceros downs y demostrando una seguridad en la recepción que lo venía minimizando. Tyreek Hill fue el factor diferencial en la redzone para los Chiefs sumando dos 2 TDs y Byron Pringle firmó unas de sus mejores actuaciones desde que juega en Arrowhead, siempre confié bastante en él. Tampoco pasemos por alto al rookie TE NOay Gray en quien la unidad de Eric Bienemy confía mucho como se demostró en una gran jugada para touchdown.
Vamos al otro lado del balón. La temporada de NFL la suelen empezar dominando los ataques y las defensas van a remolque tratando de ajustar y adaptarse al tratarse de una unidad que requiere de más entrenamiento. Pues creo que ya hace un par de semanas que estamos viendo de manera generalizada que la competición ha llegado a un punto de equilibrio. Y por suerte, no está siendo la de los Chiefs una excepción. Tenemos que hablar ya de Frank Clark. El pass rusher de los Chiefs ha recuperado un buen nivel y aunque no esté firmando unos números tremendo en cuanto a sacks, sí está siendo fundamental en la mejora global de la unidad. Unidad que también ha notado para bien la incorporación de Melvin Gordon, se lo pueden decir a Derek Carr quien estuvo toda la noche ahogado por el front 7 de Kansas.
Con una mayor presión al QB, llega la mejora de la secundaria, todo está conectado en la NFL. Fijaros si mejoró que hasta el apestado Daniel Sorensen firmó en una intercepción en uno de los melones que lanzó sin sentido Derek Carr. Secundaria en la que destacó por encima del resto Tyrann Mathieu. El safety veterano estaba en todos lados y firmó infinidad de placajes en una defensa que minimizó mucho a un rival que otras veces les había puesto en complicaciones con su explosivo juego aéreo.
No nos pasemos de positivistas y recordemos también los puntos menos negativos del partido. La majestuosa actuación de Patrick Mahomes estuvo a punto de quedar manchada por un par de malos pases que la secundaria de Raiders estuvo cerca de interceptar. Uno de ellos fue la que bajó Darrel Williams como si fuera un receptor élite. Por cierto, se me ha pasado mencionar en lo que llevamos de crónica que el RB que estuvo perfecto en el juego de pase corto que buscó el ataque de Chiefs para abrir la defensa rival. Mike Hughes también cometió un error grave en un retorno que le acabó costando a los Chiefs un touchdown. Yo confiaría el papel de returner a Byron Pringe porque ya sabéis que Mecole Hardman no me convence nada.
Bueno, recapitulemos. Bajo los focos del prime time de Las Vegas, los Chiefs tocaron su sinfonía (aunque no sea lo que más pegue con Las Vegas) más completa para colocarse con un récord de seis victorias y cuatro derrotas que los coloca como líderes de la AFC Oeste en la que perdieron todos sus rivales. Muchas cosas positivas a rescatar de un conjunto que volvió a parecerse al campeón que hemos visto en las últimas temporadas justo antes de otro partido duro contra los Cowboys y de la semana del bye por Thanksgiving donde todos podrán (¿podremos?) disfrutar del pavo si se vence a Dallas.