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Txetxu

Día duro, para que nos vamos a engañar. Los Chiefs sufrieron un colapso histórico en la final de conferencia de la AFC dejando unas sensaciones terribles en el segundo tiempo y en la prórroga. Más de media hora de football anticompetitivo en la que todo salió mal y en la que los Bengals merecieron con total claridad ganar el encuentro. Uno de esos partidos que te quita las ganas de seguir prestándole atención a tu equipo como mínimo durante un tiempo, unos días de luto hasta que pase la SuperBowl. Al final de esta misma crónica, “interrumpo mi relación matrimonial” con los Chiefs, como la infanta Cristina y Undargarín. Ya llegará Draft Season.

El problema de esta derrota es el COMO, no el QUE. Porque perfectamente puedes perder en una final de conferencia, pero es inaceptable caer de la manera que lo hicieron los Chiefs demostrándose completamente inoperantes y perdidos, sobre todo, en ataque. Los Bengals igualaron la mayor remontada (-18) en una final de conferencia y los más duro para el aficionado Chiefs es que prácticamente no necesitaron ni tirar de épica. Justo este mismo domingo coincidía con la final del Open de Australia donde Rafa Nadal remontó dos sets a Medvedev. Pero lo hizo tirando de sudor y sangre, épica, heroicidad y sufrimiento. Los Bengals simplemente se dedicaron a ajustar y a hacer las cosas bien, eso les valió para meterse en la SuperBowl.

El partido no pudo empezar mejor para los Chiefs, la defensa empezó mandando en el partido. En los tres primeros drives los Bengals se fueron con solo 3 puntos en el marcador. Los más destacado fue que nuestros CBs (Fenton y Ward) fueron capaces de ganar esos pases 50/50 que tanto daño hicieron en el enfrentamiento de la semana 17. Y estas jugadas defensivas fueron posibles porque los árbitros en esta postemporada están dejando más contacto y las secundarias lo agradecen. Si mantienen siempre el mismo rasero por mí de lujo, mucho mejor que pitar tropecientas interferencias de pase dudosas.

La defensa empezó sólida, el ataque brillante. La sensatez de los tres primeros drives fue excelsa, Reid y Bienemy ofrecieron infinidad de herramientas a sus jugadores y estos ejecutaron a la perfección. La OL protegía a Mahomes a las mil maravillas y este utilizaba todo este tiempo para escanear el campo y encontrar al hombre libre. Casi no le hizo falta sudar ni salir del pocket para lanzar 3TD y más de 200 yardas en lo que se antojaba un partido francamente cómodo. Pero el marcador se fue al descanso más igualado de lo que debería (21-10) porque Ward tomó un mal ángulo en el TD de Perine y el dúo Mahomes/Hill ejecutaron una muy mala jugada en la mismísima yarda 1 que deja a los Chiefs sin opciones si quiera de sumar 3 puntos. Era el presagio de lo que se venía en el 2T.

‘3 y fuera’. Me da hasta pereza repasar la de veces que los Chiefs fueron sacados del campo sin piedad por los Bengals en el 2T. Su defensa ajustó, se mostró más agresiva en la secudnaria y empezó a utilizar más blitz para tratar de confundir a Mahomes. Y lo consiguieron. Este lanzó una screen directamente a las manos del defensor rival, jugada que le supondría una losa tan grande como para costarle el partido a los Chiefs. Ni Mahomes ni el ataque se levantaron de todos los golpes del 2T, estaban a merced de a defensa rival. Tampoco les ayudaron desde la banda donde se limitaron a cantar carreras en primer down y no fueron capaces de ajustar al nuevo plan de los Bengals.

Nuestra defensa simplemente trataba de sobrevivir. El pass rush no brilló tanto como esperábamos ante una línea ofensiva desastrosa, pero a pesar de ello Melvin Ingran dejó muy buenas defensas en un drive importantísimo del 4Q. El problema de la defensa es que no llegó a rematar. En dos jugadas donde colapsaron el pocket, Joe Burrow se les escapó cuando ya casi estaba en el suelo para dos primeros downs prácticamente consecutivos y que acabarían siendo decisivos. Pero bueno, la defenso se dobló pero no rompió dejándole al ataque suficiente tiempo para igualarlo con un FG o ganarlo con un TD.

Pero en esa última secuencia llegó el colapso de Mahomes. Y mira que el drive estuvo bien llevado hasta la redzone gracias a una defensa de los Bengals que se volvió a acomodar en una defensa en zona bastante suave. Con eso los Chiefs se quedaron en un 1&Goal desde la yarda 5. Primero una carrera de McKinnon para una yarda y después dos jugadas horrendas de Patrick Mahomes en la que empezó a dar vueltas sobre si mismo, huyendo de dos pockets totalmente limpios y rehuyendo a simplemente lanzar un pase fuera del campo si no había nadie abierto. Quiso hacerse el héroe y salió mal cuando lo más inteligente a esas alturas de campo era jugar con inteligencia, valga la redundancia. Dos sacks seguidos acabaron dejando un FG de 44 yardas que Butker igualmente convirtió.

Prórroga, los Chiefs ganaron la batalla en la moneda y Arrowhead lo celebró, lo que me molestó mucho porque el ataque no había demostrada nada en el 2T como para depositar confianza en ellos. Y se demostró cuando en un 3&10, Jessie Bates dejó un jugadón para la intercepción que dejaría una buena posición de campo para que lo ganara McPhearson después. No es un fracaso, sí un ridículo. Draft season.

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